ENRIQUE LORENZO
De Moncorbo, Portugal. Hermano de otro procesado, Mateo de la Cruz.
De edad de treinta y dos años, solía cruzar el Istmo en la ruta Panamá-Portobelo y trabó estrecha amistad con los encomenderos, con los cuales traficaba mercancías. Arrestado en Panamá en 1636, también Lima conoció su caso a despecho de la dependencia de Panamá a Cartagena, bajo el pretexto de que así era más difícil que los sindicados escaparan o que se le infligieran castigos superficiales.
Judío religioso, confesó de “si y de otros” y descubrió a muchos judaizantes que estaban en la ruta transístmica.
Se le sometió a cruel tortura para arrancarle aquellas comprometedoras declaraciones.
Reconciliado, abjuración de vehementi, sambenito, confiscación de propiedades y diez años en las galeras, vela verde en las manos, cien azotes y se establece que habrá de guardar “carcelería en la cárcel perpetua de la Inquisición de Sevilla”, de acuerdo a la sentencia final consignada en su expediente.